Xtranamnt

Así se murió el rock venezolano, dice Sr. Cobranza en una publicación en la revista Zero, hoy me desligo de mi realidad ficticia, para involucrarme un poco más con la “R e a l i d a d” del país al que pertenezco, y que nunca dejaré de pertenecer, aunque algunas de las cosas que ahora hacemos no son buenas en un contexto general.

Que si el rock nacional le han matado, que si el rock nacional nunca ha existido, que no hay circuito, no hay difusión, no hay movimiento, no hay realidad y todos hacen música para ganarse unos céntimos dándole apoyo al regente de curso. A la final del articulo todas las bandas van a dar a un mismo montoncito, dónde son juzgadas iguales, aunque algunas ni siquiera estén al corriente de lo que pasa con la movida “Rockera” y los que “supuestamente” controlan el caos del rock comercial.

Frases como “La Banda consagrada en el 2055, Mochuelo, cuya líder ostenta el look fotogénico de una Belinda criolla”. “Desorden hace música para los oídos del orden regente”. “Y que decir de Píxel, con el Dagnino disfrazado de Punketico fashion vitim de los palos grandes”. “… Un grupito de fantoches que se las tiran de oasis, poniéndose lentes oscuros, bufandas y páltos de Dorsay en pleno trópico”. “… Son los “panas” de Billy se fue, Vinilo, Telegrama, Wahala, Los Paranoias, Los Oceánicos, Chuknorris, Tomates Fritos, y pare ud. de contar nombres imposibles de tomarse en serio”, reinan en el articulo. Comentarios bastante fuertes, pre-fabricados para llamar la atención de todos los que parecen involucrados en el delito.

No sé puede negar que el rock acá no ha tenido tanto Boom como debería, es solo cosa de unos días, los que hacen buena música, la hacen solo por un tiempo bastante corto y luego desaparecen, se separan, mueren de algún modo. A veces se debe a que el público “madura” y no así la banda con ellos, o también ocurre que la banda incursiona en nuevos ritmos y el público termina por perder el interés.

El artículo te pone a pensar, y a sacar tus propias conclusiones, lamentablemente peca por ser muy brutal, y poco objetivo estableciendo que todas las bandas venezolanas son iguales, que solo buscan el dinero, un buen contrato discográfico, y se olvidan de cantarle las cositas al gobierno, callándose lo que en verdad deberían decir, sólo por mantener un status y llegar al mayor público posible.

Es difícil tratar de establecer un punto de vista cuando quizás ambos lados tengan razón, lo que pasa es que salir en Blogs y revista criticando nunca ha servido de mucho, quizás más acción, menos palabras, más Rock que criticas, y en serio a veces si no te gusta lo que oyes, entonces no lo oigas, no es conformismo es dejar que aquellos hagan lo que se les da la gana, mientras nosotros apoyamos a los pocos que están haciendo algo bueno.

Yo no fui parte de la época dónde reino el clandestino sentimiento muerto, o bandas que eran pasadas de mano a mano, de casete a casete, yo viví el apogeo de la música pachangosa, en mi infancia escuche cosas como Karina, Xuxa, Ana Gabriel, Rocío Durcal, Juan Gabriel, Aditus, Jordano, Frank Quintero, Ilan Chester, música que mi mamá aunque con 27 años escuchaba animosa, y durante un tiempo llegue a pensar que lo más fuerte que podría existir era Maná, ese Maná que escuchaba mi papá en sus horas lejos de mi mamá. Que equivocado, no pertenezco a esa generación que quizás “Rockeo” de verdad en Venezuela, me gustaría pensar que si existió, no lo sé, no viví en ese tiempo. Yo sólo pertenezco a la gran llamada generación “FAKE”, dónde lo más real que puedes tener es tu ropa, porque todo lo demás del cabello hasta las uñas es de mentira, es fingido.

En la versión digitalizada del articulo, encontré varios comentarios pero en especial uno que llamo mi atención en sobre-manera, que resumiendo dice algo como “Todo se debe al contexto en el que vivimos, no podemos esperar que nuestras sociedades sean iguales, mejores o diferentes… Porque no estamos viviendo los mismos conflictos”, es difícil decir que quizás el rock ha sido comprado por el alto mando para así poder erradicar la poca rebeldía que queda. “Quizás el Presidente se la tire de alternativo también… Es totalmente lógico que la población rebelde no comparta el discurso pseudo-rebelde del poder y adopte lo contrario”.

Para ser honesto, me gustan muchas de las bandas nombradas en el articulo, falta difusión, falta más rock, pero poco a poco creo que el eclipse irá pasando, y si ha muerto pues deberíamos revivirlo… Lo que sucede es que criticamos nuestras bandas, porque solo escuchamos artistas internacionales, y esperamos que nuestros artistas tengan éxito en cuestión de días, y si no lo logran entonces mejor escuchemos Kayne West remezclado con el nuevo sencillo de Nelly Furtado y producido por Timbaland, o algo de Puff Daddy, o Beyonce, y quién quita y hasta Rihanna pegue un poquito, o ¿Será mejor seguir escuchando a la ya enterrada Britney con su Gimme More y sus locas posturas?.

Prefiero despedirme con “No tiene mente, tampoco siente, y miro lejos. Un mundo negro lleno de miedos, y miro lejos. Salen del suelo, caen del cielo, y miro lejos. Y al levantarme, no tiene mente, tampoco siente, y miro lejos. Los Ángeles caminan al verla, la tierra solo quiere que ella sienta”.