Comenzar de nuevo, que fastidio. Todo nuevamente, como si nada hubiera valido de algo. Desde cero, desde el principio sin poder cuestionar lo que ocurre a nuestro alrededor. Desde nada, como si no fuera difícil poder conseguir el camino indicado por el cual continuar. Desde el comienzo, desde el pensamiento original con el cual lo demás toma forma. Y aunque sea fastidioso, hay que hacerlo. No podemos quedarnos estancados en los mismos deseos hasta el final de nuestros días. ¿Cómo decir que no?, ¿Cómo decir que no a la vida misma?, esa que te empuja y te obliga comenzar. ¿Cómo dejar de intentarlo?, ¿Cómo dejar de ser parte de algo que es tan tuyo?. ¿Cómo hacerse de la vista gorda?, y pretender que la cosa no es contigo, cuando en realidad sabes que si lo es. ¿Cómo reaccionar y ver que hay que recomenzar?. A veces porque fallamos y otras porque finalizamos.
Y al terminar algo, comenzamos otra cosa irremediablemente, y así es la vida. Sin poder detenernos, si poder decir hasta aquí llegue, sin poder decir me canse, sin poder dar tu brazo a torcer. Seguimos construyendo, pensando, mejorando o ideando un nuevo método. Un nuevo principio. Una nueva apertura a ideas nuevas, e innovadoras.
Así es con todo, lo hacemos y listo. Lo hacemos para mejorar para abrirnos camino, para prosperar por así decirlo, para alcanzar metas, para cumplir sueños, para ser mejores, etc., etc. Pero otras veces lo hacemos porque estamos aburridos o porque no hay más nada que hacer. Simplemente comenzar nuevamente. A veces por obligación o por mandato, a veces por cuestionamiento quizá, o simple deber. Lo hacemos y listo.
Y con cada comenzar, descubres y reafirmas que todo comienzo es difícil. ¿Cómo debo comenzar?, ¿Por dónde debo ir?, ¿Qué camino es el indicado?. ¿Cómo tengo que hacer para que la idea tome forma?. ¿Con qué palabra debo iniciar?. Para poder finalizar un comienzo más.
Y al terminar algo, comenzamos otra cosa irremediablemente, y así es la vida. Sin poder detenernos, si poder decir hasta aquí llegue, sin poder decir me canse, sin poder dar tu brazo a torcer. Seguimos construyendo, pensando, mejorando o ideando un nuevo método. Un nuevo principio. Una nueva apertura a ideas nuevas, e innovadoras.
Así es con todo, lo hacemos y listo. Lo hacemos para mejorar para abrirnos camino, para prosperar por así decirlo, para alcanzar metas, para cumplir sueños, para ser mejores, etc., etc. Pero otras veces lo hacemos porque estamos aburridos o porque no hay más nada que hacer. Simplemente comenzar nuevamente. A veces por obligación o por mandato, a veces por cuestionamiento quizá, o simple deber. Lo hacemos y listo.
Y con cada comenzar, descubres y reafirmas que todo comienzo es difícil. ¿Cómo debo comenzar?, ¿Por dónde debo ir?, ¿Qué camino es el indicado?. ¿Cómo tengo que hacer para que la idea tome forma?. ¿Con qué palabra debo iniciar?. Para poder finalizar un comienzo más.
Luis Olivera
2:55pm
14/Dic/06
Barquisimeto – Venezuela
2 comentarios:
en cada nuevo comienzo, no empezamos de cero, somos distintos, somos una persona que lleva consigo las experiencias que antes no tenia.
Suerte en tu nuevo comienzo!
Saludos,
xenia
Un nuevo comienzo es porque algo ha terminado anteriormente... ¿Qué es lo que has terminado tú? ¿Merece la pena continuarlo como tal, o es necesario cambiar el método?
Son preguntas que nos ayudan a cambiar esa perspectiva que tenemos del nuevo comenzar... Esto no debiera ser un fastidio, sino una nueva experiencia que te espera.
Pregúntate porqué estás iniciando un "nuevo comienzo"...
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