El final se cerca. Las personas se mueven, todo cambia. El camino se quiebra en dos. Casi al final, estoy lejos de ti, lejos de tu corazón, y tu alma, y también lejos de mí, soy diferente, no soy el mismo de ayer... La vida atraviesa mi cabeza, las imágenes de mi vida, de las personas que están enfrente de mi cuerpo, no puedo entender la dificultad de vivir, de aprender, o de cualquier otra cosa, la verdad es que todo es una mierda, nada es suficiente para hacerme mejor, pero algunos días pienso que las cosas no están tan difíciles, y si, recupero mi confianza, mi esperanza, y mi deseo de vivir mi vida porque mi alma entro en mi. Mi felicidad vuelve a mí, y cambia mi opinión de la vida y el mundo vuelve a ser más verde...
Te vas, vuelves, aquí o allá, dentro o fuera, lejos o cerca, estamos al final, cerca de terminar, y también lejos de no estar... De no existir, y de dejar de ser, como avanzando, pero retrocediendo, subiendo para después bajar, y entrar en la paradoja de vivir, para así llegar a la inexorable muerte... Muerte de ti y de mi, ángeles brotan de la tierra, y ascienden en un ciclo interminable, la gente muere, los ángeles nacen, las situaciones se desarrollan, y todo deja de ser divertido, para después ser como eran.
Las creencias se apagan, y la fe renace. Todo es confuso, todo es misterioso; nada simple, ni sencillo, se van las despedidas y las vidas. Los versos dejan de fluir, y entro en la profundidad de tus ojos, y lo expectante de algo desconocido y oscuro. Los polos se invierten, y tu regreso se olvida. Todo cambia, todo cambia, todo cambia. Lo posterior se une con lo anterior, y se crea un nuevo yo, esperando cambiar de nuevo, esperando ser diferente, esperando por el final, para volver a comenzar.
Nuevo comienzo, nuevo final, nuevo comienzo, nuevo final, y todo lo nuevo ya no lo es, y todo lo extraño deja de serlo. Lo cotidiano se vuelve decadente, y lo normal deja de serlo también. No hay nada, no hay nada, no hay nada...
La nada se fusiona y se modifica, y cambia como todo lo demás y ahora la nada lo es todo. Y él todo deja de serlo, el final, el final, cuando todo se acaba, cuando toco culmina, cuando nada es serio, cuando nada es mentira.
Estamos cerca del final, de explotar, de morir, y dejar de existir, la música se va, y las imágenes se derriten en mi mente, las personas que me miran se congelan en el tiempo, ya no más, ya no más, estoy en el limbo, entre subir y bajar, entre avanzar y no avanzar.
Lastima por aquellos que nunca encontraron las cosas que olvidaron, porque jamás lo harán, se acabo su tiempo, su estado ha cambiado, los ángeles brotan de su corazón y quedan liberados de la prisión de carne, para salir y hacer lo que les plazca, la complacencia se acaba, la inocencia se olvida, y la vida culmina.
Una cana, una cana, pero no es más que otra raya para el tigre, viejo y carcomido por el tiempo, cerca de la inexistencia y de la liberación, cerca de ser el ángel que siempre deseo ser, ese que brota de la tierra y te deja para hacer lo que quiere.
De las rosas esas que eran blancas y rojas, nacen hadas del tamaño de una tasa, delgadas, con grandes alas, hadas que cumplen sueños y alegrías, hadas que solo mueren cuando las envidias, hadas que nacen de la soledad, y se alimentan de las alegrías, esas hadas que son diferentes de los duendes que solo dejan deseosos a los que no lo habían sido.
Una luz, una luz, una luz que se parece al día, una luz que surge cuando cae el sol, pero no es la luna, es la luz que te lleva al final, es la luz que no te deja en paz, hasta que te lleva al descanso eterno, es la luz que nace de la muerte, que sale de ti, de tu cuerpo sin vida, de tu cuerpo que esta al final, y si tienes suerte con tu muerte, de ti nacerá la esperanza.
Unicornios, pegazos, fénix y quimeras, viven al termino, donde la historia no tiene fin, donde muchas cosas extrañas nacen de los árboles y se elevan por los cielos, donde la maldad sólo es maldad y no es muerte, porque la muerte no existe porque la historia no tiene fin.
Donde dicen que todo es perfecto, pero nadie tiene como probarlo, donde todos quieren ir, pero pocos lo recuerdan, donde de los árboles nacen las driades, y de las aguas las náyades, donde el Erebo esta muy lejos, y sus tinieblas infernales no llegan, donde Éter reina con Gea, y donde Nix aparece de vez en cuando.
Las musas siempre están allí, inspirándote a escribir, inspirándote a vivir, y es allí donde las Parcas no tienen control, donde todos quieren vivir, pero pocos lo recuerdan.
Estamos al final, decidiendo que hacer, a donde ir, y esperando por la muerte, para saber que nacerá de nosotros, si un ángel o un demonio, si esa luz no guiará al final, donde la historia no tiene fin. Y donde la muerte no esta vigente.
Te vas, vuelves, aquí o allá, dentro o fuera, lejos o cerca, estamos al final, cerca de terminar, y también lejos de no estar... De no existir, y de dejar de ser, como avanzando, pero retrocediendo, subiendo para después bajar, y entrar en la paradoja de vivir, para así llegar a la inexorable muerte... Muerte de ti y de mi, ángeles brotan de la tierra, y ascienden en un ciclo interminable, la gente muere, los ángeles nacen, las situaciones se desarrollan, y todo deja de ser divertido, para después ser como eran.
Las creencias se apagan, y la fe renace. Todo es confuso, todo es misterioso; nada simple, ni sencillo, se van las despedidas y las vidas. Los versos dejan de fluir, y entro en la profundidad de tus ojos, y lo expectante de algo desconocido y oscuro. Los polos se invierten, y tu regreso se olvida. Todo cambia, todo cambia, todo cambia. Lo posterior se une con lo anterior, y se crea un nuevo yo, esperando cambiar de nuevo, esperando ser diferente, esperando por el final, para volver a comenzar.
Nuevo comienzo, nuevo final, nuevo comienzo, nuevo final, y todo lo nuevo ya no lo es, y todo lo extraño deja de serlo. Lo cotidiano se vuelve decadente, y lo normal deja de serlo también. No hay nada, no hay nada, no hay nada...
La nada se fusiona y se modifica, y cambia como todo lo demás y ahora la nada lo es todo. Y él todo deja de serlo, el final, el final, cuando todo se acaba, cuando toco culmina, cuando nada es serio, cuando nada es mentira.
Estamos cerca del final, de explotar, de morir, y dejar de existir, la música se va, y las imágenes se derriten en mi mente, las personas que me miran se congelan en el tiempo, ya no más, ya no más, estoy en el limbo, entre subir y bajar, entre avanzar y no avanzar.
Lastima por aquellos que nunca encontraron las cosas que olvidaron, porque jamás lo harán, se acabo su tiempo, su estado ha cambiado, los ángeles brotan de su corazón y quedan liberados de la prisión de carne, para salir y hacer lo que les plazca, la complacencia se acaba, la inocencia se olvida, y la vida culmina.
Una cana, una cana, pero no es más que otra raya para el tigre, viejo y carcomido por el tiempo, cerca de la inexistencia y de la liberación, cerca de ser el ángel que siempre deseo ser, ese que brota de la tierra y te deja para hacer lo que quiere.
De las rosas esas que eran blancas y rojas, nacen hadas del tamaño de una tasa, delgadas, con grandes alas, hadas que cumplen sueños y alegrías, hadas que solo mueren cuando las envidias, hadas que nacen de la soledad, y se alimentan de las alegrías, esas hadas que son diferentes de los duendes que solo dejan deseosos a los que no lo habían sido.
Una luz, una luz, una luz que se parece al día, una luz que surge cuando cae el sol, pero no es la luna, es la luz que te lleva al final, es la luz que no te deja en paz, hasta que te lleva al descanso eterno, es la luz que nace de la muerte, que sale de ti, de tu cuerpo sin vida, de tu cuerpo que esta al final, y si tienes suerte con tu muerte, de ti nacerá la esperanza.
Unicornios, pegazos, fénix y quimeras, viven al termino, donde la historia no tiene fin, donde muchas cosas extrañas nacen de los árboles y se elevan por los cielos, donde la maldad sólo es maldad y no es muerte, porque la muerte no existe porque la historia no tiene fin.
Donde dicen que todo es perfecto, pero nadie tiene como probarlo, donde todos quieren ir, pero pocos lo recuerdan, donde de los árboles nacen las driades, y de las aguas las náyades, donde el Erebo esta muy lejos, y sus tinieblas infernales no llegan, donde Éter reina con Gea, y donde Nix aparece de vez en cuando.
Las musas siempre están allí, inspirándote a escribir, inspirándote a vivir, y es allí donde las Parcas no tienen control, donde todos quieren vivir, pero pocos lo recuerdan.
Estamos al final, decidiendo que hacer, a donde ir, y esperando por la muerte, para saber que nacerá de nosotros, si un ángel o un demonio, si esa luz no guiará al final, donde la historia no tiene fin. Y donde la muerte no esta vigente.
Atentamente
Luis Olivera
5:54pm
18/Nov/06
BarQto - Venezuela
Luis Olivera
5:54pm
18/Nov/06
BarQto - Venezuela
2 comentarios:
Como siempre escribiendo buenos Textos jajaja! tu habilidad para escribir! es perfecta!!!! sigue asi!!!! cuidese mi pana!
DARKNESS FOREVER
buenas que tal? mi mejor amigo aqui arriba tiene razon! tus escritos son muy buenos! deberias darle unas clases de escritos a DeathLalo jajajaja! perdoname Lalito!!!! bueno en fin.... tus blogs estan muy buenos!!! no los he leido todos pero te prometo que lo hare!!!! cuidate mucho!!
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